sábado, 18 de junio de 2016

Comunidades de plantas silvestres en los pastizales de montaña: algunas reflexiones


Todos sabemos que en los últimos años se están  imponiendo cambios en el concepto de jardín y cada vez se tiende más hacia un tipo de jardinería más respetuosa con el medio ambiente natural, más ecológica y más adaptado al entorno. Como consecuencia de ello se han puesto de moda las borduras de plantas vivaces –perennes, incluidas plantas silvestres, combinadas con gramíneas- que florecen de forma sucesiva y mantienen su estructura incluso durante parte del invierno, con las hojas o ramas ya secas y las semillas como alimento importante para la fauna salvaje. Piet Outdolf uno de los paisajistas más conocidos de este movimiento, habla de “la belleza de la planta muerta”.
Echium vulgaris y Helianthemun nummularis (azul y amarillo, una combinación perfecta )
 
Gran parte de la inspiración para esta nueva forma de hacer jardines o paisajismo viene, sin duda, de la observación de la naturaleza, especialmente, de cómo viven e interactúan las comunidades de plantas en el mundo natural, y nada más hermoso que ver estas plantas en los pastizales y prados naturales de la montaña de Asturias. La variedad y combinaciones de flores y colores es sin duda asombrosa. En esta selección tiene mucho que ver el tipo de tierra, el acceso al agua, la situación al sol o a la sombra, el clima, la altitud, pero también la mano del hombre. Éste ha contribuido de forma importante a la selección de la flora de estos prados, a través de la siega, del pasto del ganado o del abonado casi siempre orgánico. Estos pastizales son un gran fuente de inspiración y un relajo para la mente y para el espíritu. Difícil competir con la naturaleza en nuestros jardines.

Coto de La Guarda en la parroquia de Cuérigo, antigua explotación comunal.

 
En primer término Asphodelus albus (gamón)


Casería de "Cocha-la-grande"


Pradera mixta en plena floración


Casería de "Ro-la-pala"


Lychnis flos-cuculi (flor de cuco, color rosa) y ranúnculos (amarillo)
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Dactylorhiza maculata (orquídea satirión manchado, una de las muchas orquídeas de los prados de la montaña asturiana)
Pradera mixta: Scabiosa, Malva sylvestris, Lotus corniculatus, Trifolium, etc
Pradera mixta: Leucanthemum (margarita), Anthyllis (trébol rosa), Lotus corniculatus (cuernecillos amarillos) 
Casería "Les Cuartes"
Pradera mixta: prunela vulgaris (azul) y Leucanthemum (margarita)
Echium (azul), Geranium pratense(rosa) y Helianthemum (amarillo)
 
Orchis ustulata (orquídea manchada). Otra espectacular orquídea de nuestros prados. 
Echium vulgare ( chupamieles,  viborera) una planta fundamental para las abejas, con una floración muy atractiva y de larga duración.

Prunella vulgaris (azul), Anthyllis vulneraria (trébol granate) y Helianthemum (amarillo)
 
Rhinantus angustifolius (pitinos). Tradicional planta de pastizal con flores en forma de cabeza de gallina. Llena los prados de cabezas amarillas con ojos y pico de color azul
Pradera mixta: Dacthilorhiza (orquídea) , Achilea millefolium (milenrama), Helianthemum
Serapia cordigera: orquídea gallo acorazonado.

Trifolium campestre (trébol amarillo)
 Casería "La Viesca". Al fondo los pueblos de Cuérigo, Collanzo y Santibáñez de la fuente.

6 comentarios:

  1. Me gusta tu reflexión, las praderas autóctonas en muchos lugares han sido sustituidas por mezclas menos complejas, justo ahora cuando las autenticas praderas naturales van siendo menos abundantes y mucho menos diversas se estudian, valoran, siempre pasa igual con todo ¿verdad? Las praderas como las que nos muestras aportan diversidad y variedad al prado, alimento para multiples organismos, amen de los colores... que aportan al paisaje. Hoy día las tecnicas agricolas, la tecnificación agraria y la globalización ponen en jaque las particularidades de cadda lugar...
    Las modas de utilizar plantas de las denominadas "mala hierba" parece que crece ( en otros paises es ya habitual desde hace basatnte tiempo), es cierto que para muchos de los que venimos de una forma de ver el mundo muy "agrícola" y con unos conceptos de la agricultura y jardinería más tradicionales, puede resultar chocante más aún en casos de uso extremo de plantas de este tipo y que aporten valor al conjunto una vez muertas y secas... aún más fuera de los climas atlanticos donde el implacable verano agosta todo y la concepción colectiva de un lugar bonito tiende a verse con flor o verde...
    Yo en general en mi forma de verlo optaria por vias intermedias, los extremos nunca me han gustado en ningún ámbito... Es un tema que me tiene un poco contrariado y que cada vez que paseo por el campo y veo una lindera llena de diversas plantas, un campo de cereal de los que cada vez menos se ven invadidos por amapolas... le doy vueltas a este tema del uso de las plantas ruderales y arvenses.
    Un saludo y perdon por el toston

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    1. Mario. tienes toda la razón. Es muy bonito ver un paisaje de este tipo en el momento justo de la floración. Es maravilloso, sin duda. He visto decenas de videos de jardines tipo Piet Outdolf justo en ese momento y sin duda resultan maravillosos, pero el año dura doce meses y no es tan fácil mantener el interés en el jardín durante todo ese tiempo. Como tu dices los extremos no llevan a ningún lado, y casa paisaje y cada zona exige una jardinería diferente. Lo que puede resultar maravilloso en las praderas de Holanda puede que en Asturias parezca bastante anodino. La conclusión es que cada uno haga lo que le gusta cada momento en su jardín. Un día contaré lo que me "contó" un paisajista alemán de bastante renombre sobre mi jardín.
      Saludos y no hay nada mejor que un debate para expresar opiniones.

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  2. Hola Jose Antonio:
    Quiero darte la la enhorabuena por tu blog pues, aunque lo acabo de conocer y no me ha dado tiempo más que a recorrerlo " a saltos" me ha parecido interesante y con una fotografía muy cuidada.
    Este tema de los pastizales (tanto de alta montaña como de las zonas bajas), yo les llamo "prados floridos" lleva interesándome varios años como forma de jardinería, de tal manera que he devuelto una parte del césped de mi jardín en Oviedo a su estado de prado de siega y diente original para ver la manera de mejorarlo y mantenerlo. A todos en casa nos encanta el color, el movimiento y la naturalidad que aporta al conjunto. Poco a poco voy introduciendo especies de flor para alargar la temporada de interés, tanto foráneas: camassias, narcisos, liatris, coreopsis,.. como autóctonas: Verbascum, Dipsacum fullonum, Primula veris o la Dactylorhiza elata. Aquí en Asturias tenemos la suerte de que la pradera se da de forma natural, sin riego ni muchos cuidados, y me parece que tenemos que aprovecharla.

    Un saludo.

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  3. Fernando, gracias por el comentario. Si eres de Asturias entenderá muchas de las entradas que voy poniendo en este blog y con el tiempo podemos intercambiar ideas y plantas que por lo que veo entiendes un montón. Si ves cosas de mi jardín que te interesen comunícamelo.
    Saludos

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  4. Gracias por el ofrecimiento, lo mismo te digo.

    Un saludo

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