jueves, 15 de junio de 2023

El templo de Kek Lok ( Templo de la Suprema Alegria), un ejemplo del sincretismo religioso malasio.

 


Templo de Kek Lok. Al fondo la ciudad de George Town.

Contemplar este enorme templo monasterio levantándose sobre las colinas cubiertas de espesa vegetación tropical es casi un espejismo  y puede resultar desconcertante. Uno no sabe muy bien a qué atenerse. ¿Una Disneylandia budista? No. Más bien una especie de Fátima o de Lourdes. Europa tiene lugares bastante similares a este. Kek Lok es el mayor santuario budista de Malasia y uno de los mayores de Asia, y se ha convertido en un lugar de peregrinación para fieles de otros países del entorno. Fue construido en gran parte gracias a las donaciones de  los ciudadanos chinos de la ciudad de Georgetown, como símbolo de su poderío económico y su influencia entre los años 1890 y 1905, y eso, en un país de mayoría musulmana, es un gran ejemplo de la convivencia pacífica de las dos grandes religiones, al menos hasta ahora.

 


Parte superior del templo con la gigantesca estatua de 30 metros de la Diosa de la Misericordia.


Estupa de Rama VI o de los Mil Budas.

La idea de construir un gran templo budista en la ciudad fue idea de un monje llamado Beow Lean, quien solicitó la ayuda del emperador chino y de los grandes abades de Fujian e incluso del rey de Tailandia Rama VI. El templo fue patrocinado por los jefes de los 5 grandes clanes chinos de la ciudad, los “Hakka tycoons”, quienes representaban las más grandes fortunas de la época. Uno de ellos donó las tierras y todos pusieron grandes cantidades de dinero para su construcción, aunque da la impresión de que esta no parece acabarse nunca. El tamaño del templo, con sus innumerables halls de oración, ermitas, estupas, edificios residencia para monjes, colecciones de estatuas, jardines, estanques, etc. te deja anonadado. Una especie de ascensor inclinado te lleva de un nivel a otro hasta llegar a la gran estatua de bronce de la “Diosa de la Misericordia”, de 35 metros, que corona el recinto.  Todo aquí es enorme y las estatuas de buda se multiplican como réplicas una de la otra. Por todas partes brilla el oro que cubre las estatuas y el rojo de los faroles de los que cuelgan los nombres de sus donantes.

 

El templo intenta representar todas las ramas del budismo, del Mahayana al Theravada además de  la influencia confuciana en el budismo chino. En este sentido acoge a todos los fieles de las diferentes ramas de esta religión y filosofía. La gran pagoda central, llamada Ban Pho Thar o de los Diez Mil Budas, tiene una base de influencia China, el cuerpo central Tailandés y la parte superior Birmana. En el interior de sus halls de oración y ermitas conviven Budas tailandeses con dioses y demonios chinos. Decenas de estatuas de animales que representan bien el horóscopo chino o bien a otros animales con significado religioso como vacas, tortugas o leones se ven por todas partes. También hay grandes estanques llenos de tortugas que representan la longevidad y una larga vida. Fuentes y jardines llenos de flores de loto y otros vegetales con significado espiritual llenan las diferentes terrazas. En los templos budistas nada existe por azar y todo tiene un significado. También los farolillos que cuelgan por todas partes con nombres, en su mayor parte de personas fallecidas, tienen una gran importancia para las familias como homenaje a sus antepasados. Suenan los gongs y los címbalos que acompañan las largas letanías de los monjes en los halls de oración. Siempre hay un ambiente alegre y de respeto en los templos budistas. Lo que para los europeos es una decoración bastante “kitsch” para los budistas tiene un enorme significado, incluidos los colores. No hay duda de que este gran templo es todo una síntesis una de las grandes religiones de Asia.


Estanque de las tortugas en la parte baja del templo.


Uno de los innumerables hall de oración con estatuas del horóscopo chino en el jardín. 



En el interior predomina el color del oro que cubre paredes y estatuas de Budas.


Vista de la ciudad desde la terraza superior.


Cada templo o capilla está rodeado de un mundo vegetal de plantas en macetas o en pequeños patios.
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La decoración es extremadamente abigarrada y colorista.


Sobre una ladera decorada con símbolos budistas sobresale la estupa de Rama VI. 


Hall de oraciones.


Otro de los numerosos patios interiores.


Balcón sobre la ciudad.


Los templos y edificios se superponen unos a otros en grandes terrazas.




Los detalles decorativos y las plantas de flores crean un ambiente relajado y edificante.


Lujoso interior de uno de los enormes halls de oraciones.





Entrada a la gran estupa de los Diez Mil Budas


Jardines en torno a la estupa.





Gigantesca flor de loto, símbolo de la pureza.


Macizos de flores alrededor de los templos.


Vista desde lo alto de la estupa.




Las etiquetas que cuelgan de los farolillos son nombres de antepasados fallecidos. Es una forma de honrar su memoria por parte de las familias que los donan.


Interior de uno de los hall de oración.


Dos últimas vistas del complejo central del gran templo.



4 comentarios:

  1. La verdad sea dicha estas culturas asiáticas son únicas en la belleza de templos, adornos, coloridos y en el cuidado de los jardines, en algunos aspectos dan envidia.
    Maravilloso reportaje.
    Un abrazo amigo Jose y feliz fin de semana.

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    1. Gracias Juan. A mi también me gusta ese colorido y, sobre todo, la atención y el respeto hacia la naturaleza y las plantas que tiene los budistas. Ya podían copiar algo la religión católica aquí en este país.
      Un abrazo.

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  2. La espectacularidad y el colorido de estos templos siempre me han fascinado. Precioso reportaje, incluyendo a esa flor de Loto tan poco habitual.
    Muchos besos y feliz semana.

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  3. Gracias Montse. Me alegro que te guste el reportaje.
    Un abrazo

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