El 23 de Mayo de 1966, la real
Academia de Bellas Artes, aprueba un dictamen de la Comisión de Monumentos en
el que se recomienda la declaración de la iglesia de Serrapio, en el concejo de
Aller, como Monumento histórico artístico.
Según la ponencia presentada por
D. Luis Menéndez Pidal: la iglesia de San Vicente de Serrapio,
situada en el Concejo de Aller, se asienta sobre lo alto de una colina que se
alza a un costado de la carretera, ya próxima a Cabañaquinta, bordeando el
angosto desfiladero por donde corren las aguas del río Aller. Su espléndido
emplazamiento, rodeado de verdes praderías cubiertas de espesos bosques
milenarios, componen aquel bellísimo lugar, consagrado posiblemente a los
dioses antes de la cristianización de Asturias como es frecuente en otros muchos lugares donde hoy se encuentran
muchas iglesias españolas. Nuestra sugerencia tiene por base la curiosa lápida
funeraria dedicada a Júpiter hallada entre los muros del templo, que dice:
IOVI. OPTIMO £T, MAXSVMO SACRVM. ARRO NIDAECI. ET. COL IACINI PRO. SAL VTE.
SIBE ET SV IS. POSVERUN. Que viene a decir: «A Júpiter Optimo y Máximo,
levantaron esta ara en demanda de protección para sí y para los suyos, los
Arronio, hijos de Dacio y sus colonias o allegados.
Lápìda funeraria dedicada a Júpiter encontrada en la iglesia. |
Por debajo de la iglesia se
extiende el pequeño pueblo de Serrapio, quizás posterior a la construcción
originaria de la iglesia, que debió de ser un lugar de reunión y peregrinaje para
los habitantes del concejo durante la época medieval. El pueblo debió de tener una buena época de
actividad económica hacia los siglos XVII y XVIII como lo confirman la
existencia de varias casas solariegas de buen tamaño y factura (El Castañiu, La
Rectoral, etc.) además de un importante número de hórreos. Hay buena pradería alrededor
y la vega junto al río debió de ser muy fértil. Hoy se han restaurado algunas de
estas casas y un par de ellas se han convertido en hoteles rurales. También se mantienen en pie y en buenas
condiciones numerosos hórreos, lo cual es casi un milagro. Sin duda el turismo
generado alrededor de la iglesia ha sido un factor importante en la
conservación de este pequeño pueblo que muestra con orgullo sus huertos y casas
bien cuidadas. Un ejemplo para otros pueblos de esta zona. Os animo a
visitar este precioso pueblo y su iglesia. El Ayuntamiento de Aller también
organiza visitas guiadas gratuitas, varios días a la semana, durante el verano.
Cualquier momento es bueno para visitarlo, aunque tal vez el otoño sea el mejor momento para sentir la belleza del paisaje y del entorno.
La iglesia de San Vicente de Serrapio levantada en un cerro y rodeada de bosques y praderías. |
Interior de la iglesia con el ábside central y dos capillas laterales decoradas con pinturas. |
Las pinturas del ábside, de factura medieval fueron repintadas numerosas veces a lo largo de los siglos. |
En este segundo capitel Sansón pelea con un león escoltado por una harpía y un soldado con cota de malla. |
Lápida fundacional incrustada en la sacristía. El presbítero Gagius hizo la basílica. Fue hecho a mediados de julio en la Era DCCCCLXXXII (año 944) Mellitus hizo. |
El techo de la nave principal es de madera, probablemente del XVI o XVII. |
Puerta de entrada al templo. |
La pila bautismal es otra pieza románica de gran interés con decoración de rombos y sogueado. |
Todas estas lápidas incrustadas en una pared de la sacristía fueron encontradas durante una reparación por el párroco D. Pedro Zapico entre 1880 y 1886 |
Antigua sacristía medieval con decoración geométrica en la bóveda y paredes. |
Dos de los canecillos exteriores muestran un atlante y dos gemelos que miran en direcciones opuestas. |
El gran porche que vemos al frente de la iglesia fue construido en el siglo XVIII. |
Desde el alto donde está emplazado la iglesia se contempla el valle del río Aller y el pueblo de Soto con un castillo de origen medieval. |
Parte central del pueblo de Serrapio. |
Huertos y casas bien cuidadas en el pueblo. |
Un buen ejemplo de Casona del siglo XIX con corredor y solana. |
Hórreo de buena factura y conservación con pegollos de madera. |
Vista del pueblo recostado en una ladera. Al fondo se ve la cada de la Rectoral con un pequeña capilla al lado. |
Panera con corredor corrido y grandes pegollos de piedra incrustados en una pared posterior. |
Otra buena casona con el corredor muy modificado. |
En la parte baja del pueblo hay otro conjunto de casona y hórreo muy bien restaurados. |
Imponentes hórreos de recias vigas de castaño. |
Aperos de labranza abandonados debajo de un hórreo. En primer término una carreña para el transporte del "cucho" -abono- a los prados y huertos. |
Dos vistas del pueblo de Serrapio con sus huertos y casas. |
Después de unas cortas vacaciones retomamos el tema bloguero y pasamos a saludar y visitar a los amigos.
ResponderEliminarLa iglesia es una pasada y el pueblo es precioso, no conocía esa zona. Es un lugar encantador amigo Jose y, además, se aprecian sus casonas bien cuidadas o rehabilitadas. Tenemos zonas que son una maravilla, que pena que, se vayan quedando despobladas algunas.
Un abrazo y buen resto de semana.
Gracias Juan. Me alegro que estés de vuelta. Yo aún no me he movido de Asturias este año. A ver en el otoño o invierno si el coronavirus nos da un respiro.
ResponderEliminarUn abrazo
La sobriedad del arte románico siempre me ha fascinado. Mil gracias por tan interesante paseo.
ResponderEliminarUn abrazo.
Gracias Montse. Me alegro que te guste la entrada. A mi también me fascina el arte románico.
EliminarUn abrazo.
Cuando vuelva a Asturias, intentaré verla. Besos.
ResponderEliminarGracias Teresa. Haz un recorrido por Aller que hay mucho que ver.
EliminarUn abrazo.