Floraciones en la Barrosa a principios de Julio.

 

Corepsis "Early", Heliopsis Scabra y Dalia "Double delight".

Cuando yo era un muchacho los días a principios de Julio solían ser luminosos y soleados. Recién estrenadas las vacaciones de verano era el tiempo de la siega y en los prados se oía el sonido de las guadañas al cortar la hierba fresca que se secaba al sol e impregnaba el aire de ese olor característico a canícula de verano. Era tiempo de cerezas y de baños y juegos en las heladas aguas del río. 

Delphinium, y Alcea rosea.

Ahora ya solo es recuerdo y un poco de nostalgia. Como el tiempo, que ya tampoco es el mismo. Hace un par de semanas que un bochorno húmedo y una niebla casi omnipresente nos mantiene en una especie de limbo. Si no fuera porque las plantas siguen a lo suyo y dan sus flores no sabría decir en que estación estamos. Nos hemos librado de esas temperaturas tan altas que han achicharrado al resto de la península y que, supongo, han dejado jardines y huertos boqueando, pero hemos sudado a mares sin apenas ver el sol. Eso sí, algún día la humedad ha llegado al 95%. A las plantas parece gustarles esta temperatura casi tropical, sobre todo a las Vivaces de clima templado que florecen con profusión y se mantienen erguidas y crecen sin parar. No tanto a las de clima mediterráneo como las salvias, que crecen descontroladas   y sin forma, pero en general el jardín presenta un buen aspecto con floraciones abundantes y un crecimiento casi constante de arbustos y frutales. Manzanos, perales y ciruelos están a rebosar, al igual que nogales y avellanos, aunque todo depende de los dos próximos meses. Tan solo necesitamos algo más de sol y que llegue el verano de una vez.

Lilium "Rialto" sobresaliendo sobre las hojas del Cornus controversa variegata.

Esta quincena predomina el amarillo en la Barrosa: Heliopsis, Hemerocallis, Coreopsis. Oenetheras e Hypericus están en su mejor momento, todas en amarillo. También las rosas están floreciendo abundantemente a pesar de que nunca se me dieron bien. Algunos Delphinium aún aguantan en pie, al igual que algunos Lilium. Las Dalias comienzan ahora. Este año he plantado alguna Dalia nueva, de procedencia inglesa, de la serie “Bishop” pero aún no han crecido lo suficiente para que destaquen. Habrá que esperar al menos otro año para ver una floración más consistente.  El parterre de Vivaces que planté al lado del huerto hace dos años ha mejorado mucho y ahora está en toda su plenitud. Aquí os dejo unas fotos de esta semana en la Barrosa.

Hace un mes que los Delphinium están en flor.

Penstemon "Hidcote Purple" y Hemerocallis "Crimson".

Spiraea y Rosa floribunda.

Comienzan a florecer las Hortensias.

Gramíneas alrededor de una manzano.

Oenothera fruticosa "Sonnen Wende".

Hipericum y Salvias.

Rosa floribunda y Hebes.

Hidrangeas en medio de diferentes arbustos.

Salvia michrophilla "Royal Bumble", la mas resistente de todas las Salvias perennes.

Dianthus y Crisanthemus.

Rosa rugosa en primer término.

Rojo y amarillo y naranja.

Los arbustos de Hipericum florecen bien a la sombra.

Hipericum y Spiraea.

Una vista de la parte baja del jardín.

El macizo del huerto en plena floración. Al fondo cultivo tomates bajo un tejado de plástico de invernadero. Aquí resulta muy difícil cultivar tomates si no están protegidos de la lluvia y del frío de la noche.

Esta Dalia granate es la primera en florecer.

Las Vivaces ya han cubierto totalmente este arriate junto con un par de rosales y una bola de Berberis.

Coreopsis "Early" y Alchemila millefolium.

Unos destellos de azul creo que combinan bien con los colores cálidos de este macizo.

Centaurea y Crisanthemus.

Santolina apunto de florecer y Spiraea.

Lobelias en una maceta.

El estanque ya está totalmente cubierto de vegetación aunque aún no han florecido los nenúfares.