Gol Gumbaz, uno de los mayores edificios del sultanato de Bijápur |
Bijápur, en el estado de
Karnataka, es una ciudad media y provinciana, como tantas otras en la India,
que durante apenas doscientos años, entre el siglo XV y el XVII tuvo su momento
de gloria gracias a ser la capital de la dinastía Adil Shah. En ese momento,
el sultanato de Bijápur se extendió ocupando territorios en el sur de la India
hasta que el temible Aurengzeb, del que hablé en una entrada anterior, acabó
con su independencia en 1686 y pasó a formar parte del imperio mogol que
controlaba la mayor parte de la India. En ese breve espacio de tiempo, los
sucesivos sultanes de la dinastía construyeron
monumentos de una gran delicadeza y perfección arquitectónica: palacios,
mezquitas, jardines, embalses, así como
una enorme muralla que rodeaba toda la ciudad. Hoy, apenas quedan unos pocos en
pie, pero son suficientes para darnos una idea de la enorme proeza que
significó construir la 2 ª mayor cúpula del
planeta, (la 1º es la del Vaticano
terminada en 1607) construida entre 1626
y 1657, como mausoleo para la familia del sultán Adil Shah.
Mausoleo Ibrahim Rouza. |
Bijápur está
demasiado lejos de las rutas principales de los turistas que visitan la India y
la ciudad parece decidida a abrazar la modernidad mientras gran parte de su
pasado permanece en ruinas. La mayor parte de lo que fue la ciudadela antigua así
como la muralla y sus puertas monumentales permanecen a la espera de tiempos mejores.
Necesitaría una lluvia de dinero para restaurar sus monumentos y atraer
turistas que traigan divisas y recursos, pero eso no ha llegado todavía.
Mientras, debemos conformarnos con los dos monumentos que se conservan en pie y,
gracias a los cuales, un goteo de turistas despistados se acercan a la ciudad
durante unas pocas horas, o todo lo más una noche para irse al día siguiente.
Ambos son grandes mausoleos de la dinastía reinante en aquellos siglos. El
primero de ellos es el mausoleo Ibrahim Rouza, construido por el sultán Adil
Shah II para su reina Taj Sultana. Irónicamente el murió antes, y tuvo que
terminarlo su esposa. Son un par de edificios el uno frente al otro, con un estanque para las abluciones
en el centro. El conjunto es de una enorme y delicada belleza, que en nada tiene
que envidiar al Tah Mahal de Agra (el arquitecto del Tah se inspiró en este mausoleo para construir los
minaretes así como los estanques que lo
reflejan). Toda la superficie exterior está decorada con intricados motivos
florales y caligrafías del Corán. Levantados sobre una gran plataforma de
piedra y rodeados de jardines y fuentes (hoy sin agua), dan la impresión de
flotar en el aire (lo mismo que el Tah
Mahal). Sus cúpulas y minaretes acentúan aún más esa imagen etérea e ingrávida
tan característica de la arquitectura oriental. En su época, una parte de los edificios debió
de estar cubierta de estuco blanco, similar al mármol, contrastando con el
color casi negro de la piedra e incrementando la sensación de sutilidad y
belleza. Hoy en día ese efecto se ha perdido. Tampoco los estanques que debieron
reflejarlo tienen agua. Es el mismo destino de muchos otros monumentos del
pasado.
Ruinas de la muralla y edificios abandonados. |
En cuanto al otro gran mausoleo, Gol
Gumbaz, construido por el hijo de Adil Sahh, aquí la fragilidad y la belleza se
sustituyen por el tamaño y la monumentalidad. El gigantesco cubo de piedra
rodeado de cuatro torres y con la mayor cúpula de la India, y segunda del mundo,
como dije antes, se asienta en un gran parque rodeado de jardines, salas de
descanso, puertas monumentales, una escuela coránica, etc. Su construcción duró
más de treinta años, y nunca fue terminado del todo. Para hacernos una idea, la
superficie de su cúpula es de 1.695 metros cuadrados (el Panteón de Roma es de
1393). El edificio central es un gigantesco cubo sin pilares, de siete pisos de
altura, sobre el que descansa la enorme cúpula construida con una técnica de
pechinas entrelazadas que van rotando. El edificio, cuyas paredes alcanzan los
tres metros de grosor, está flanqueado por cuatro torres hexagonales con
escaleras interiores por las que se accede a la azotea y al interior de la
cúpula. La técnica utilizada es bastante diferente a la europea de la época,
pero es un ejemplo del gran nivel de las técnicas de construcción en la
India del siglo XVI y XVII. Tal vez dentro de unos años haya muchas más cosas
que visitar en esta ciudad, si algún día consiguen los fondos suficientes para
restaurar gran parte de su historia pasada. Espero que estas fotos os den una
idea de la belleza de estos monumentos.
Entrada al mausoleo Ibrahim Rouza. |
El mausoleo consta de dos edificios, uno mirando al otro que parecen iguales, pero en realidad no lo son. Estanque en el centro, desgraciadamente sin agua. |
Interior de uno de los edificios con las tumbas de la familia del sultán Adil Shah. |
El exterior de los edificios está decorado con tallas de flores y caligrafías del Corán. |
Puerta de entrada a uno de los panteones con decoración geométrica y caligrafías.. |
El segundo edificio. Un grupo de Cannas rojas es todo lo que queda de la jardinería interior. |
Impresionante.
ResponderEliminarEs precioso todo, me encantaría verla. Saludos.
ResponderEliminarque pasada, como siempre dando envidia sana y contandonos la historia del lugar y tus impresiones.
ResponderEliminarNo dejes de hacerlo!!!
saludos